Blog > Entrega de última milla
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23 febrero 2022 | 8 min read
La crisis sanitaria de la Covid-19 generó una subida de ventas en línea sin precedente, tanto de productos como de servicios. En 2020 esas ventas llegaron a 112 mil millones de euros, subiendo un 8.5% en un año. Con la subida del e-commerce, las entregas a domicilio subieron también. Según varios expertos, estos nuevos hábitos deberían permanecer en los próximos años. Por eso la optimización de la última milla es un tema tan importante para múltiples distribuidores que desean satisfacer las expectativas de los clientes sin afectar demasiado a su margen y su huella ecológica. Es el reto logístico al que se enfrentan los profesionales del sector de la distribución.
La última milla es el proceso más caro de la cadena logística y además tiene un impacto nefasto sobre el medio ambiente con más de un 30% de emisiones de gases contaminantes. Un gran número de la población mundial compra por internet. En efecto, un 27.6% compra en línea y por eso los expertos intentan desarrollar soluciones para reducir el impacto financiero y ecológico de la última milla. Hoy en día, el objetivo es proponer una entrega flexible, rápida y responsable.
Es cierto que los hábitos de compra y consumo evolucionan constantemente. Con el desarrollo del e-commerce y la cultura de la inmediatez, los consumidores multiplican los pedidos de poco volumen. Ese nuevo fenómeno social provoca un gran aumento de flujos de mercancía con un número cada vez más alto de pedidos a entregar al consumidor final.
Por otro lado, las entregas de productos alimenticios no son la excepción a la regla. Los consumidores evitan los desplazamientos a los hipermercados los días de gran afluencia y hacen la compra en línea. Los pedidos se realizan durante la semana para una entrega a domicilio en un par de días u horas. En 2020, 3 de cada 10 españoles compraba en línea y desde entonces este porcentaje no para de crecer.
Desde hace algunos años observamos un aumento del tráfico urbano, las condiciones de circulación y estacionamiento son cada vez más difíciles en los centros de las ciudades. Las consecuencias negativas de la contaminación atmosférica sobre la salud de los ciudadanos son innegables.
Por eso varias capitales decidieron implementar nuevas normativas con el fin de limitar el acceso a algunas zonas urbanas. De hecho, existen restricciones de tráfico y acceso para algunas categorías de vehículos muy contaminantes como es el caso de Madrid, Barcelona, Sevilla, Valencia y Valladolid
Hoy en día los distribuidores tienen que hacer frente a una demanda muy importante en algunos eventos. Por ejemplo, durante las rebajas, el Black Friday o el Cyber Monday que atraen cada vez más compradores en línea. Son momentos de compra privilegiados para el consumidor, en 2020 esos eventos alcanzaron récords.
En España, las ventas se intensificaron durante la edición 2020 del Black Friday con respecto al año pasado. Las consecuencias son inmensas sobre la actividad logística y la gestión de flujos hasta el cliente final. En 2020 los pedidos aumentaron un 27% comparado con 2019. Según Marketing 4 e-commerce, la facturación de los e-commerce españoles en la campaña de Black Friday creció un 24,93%.
La entrega de algunos productos necesita cumplir con normas: el control de temperaturas, nivel de humedad, grabación de datos. Esta trazabilidad de operaciones se realiza principalmente en el sector de la salud con las entregas de medicamentos. El sector agroalimentario y la entrega de productos frescos también tiene algunas especificidades. Organizar esas entregas es particularmente complejo para los transportistas que deben gestionar las condiciones en las que se conservan y se envían los productos, a veces vital para algunos pacientes.
Con el fin de poder satisfacer las expectativas de entrega cada vez más altas de los consumidores. Las empresas se ven obligadas a proponer servicios de entrega de última milla más innovadores y rápidos que nunca. Ahora, los métodos de entrega se multiplican: a domicilio, en puntos de recogida, en tienda, en el lugar de trabajo, en consignas que permiten ir a buscar su pedido durante todo el día.
Para ir más allá, algunos proponen herramientas de entrega colaborativas que permiten a los clientes recibir un pedido gracias a una empresa externa. Hace algunos años, las entregas con robots solo existían en la ciencia ficción, ahora es una realidad. Efectivamente, algunos repartidores proponen servicios de entrega por dron aéreo o terrestre.
Los consumidores son cada vez más exigentes sobre los plazos de suministro de mercancías. Los transportistas deben disminuir los plazos de entrega hasta el cliente final. Por eso proponen ahora, un modo de entrega express, es decir, una entrega en menos de 48H es un verdadero argumento de venta. Los consumidores eligen cada vez más esta opción, sin embargo, gestionar este método de entrega es muy complejo y costoso a nivel del transporte, además del impacto sobre el medio ambiente.
La entrega de última milla representa un coste muy alto en la cadena de distribución logística. Efectivamente, a medida que la mercancía se acerca del domicilio, el coste del transporte aumenta. La última milla representa un 20% del coste de transporte hasta el cliente final. En general, las empresas deciden cubrir una parte del coste del transporte porque unos gastos de entrega demasiado elevados pueden disuadir numerosos consumidores en el momento de validar y proceder al pago de su carrito de compra. Por eso la gestión y optimización de la última milla es hoy una preocupación muy grande para los distribuidores. Con el fin de mantener una entrega a costo reducido o gratis, las empresas deben implementar nuevas soluciones limitando los gastos relacionados con esa última milla.
Más allá del producto, el consumidor concede cada vez más importancia a la entrega de la mercancía. Un retraso de entrega, un paquete dañado, errores en la mercancía, ausencia de entrega el día previsto o ausencia de información de seguimiento pueden tener un impacto nefasto sobre la satisfacción del cliente final. En caso de mala experiencia de entrega, el consumido no volverá a pedir al distribuidor.
Hoy en día, los consumidores tienen expectativas en término de entrega:
Una entrega de última milla fácil y eficaz permite fidelizar los consumidores y también les incita a aumentar sus gastos. Por otro lado, un cliente satisfecho compartirá su experiencia positiva con sus allegados, por eso los distribuidores deben necesariamente centrarse en la experiencia del cliente en la entrega de última milla.
¿Por qué ofrecer una experiencia de entrega de calidad?:
En el contexto actual de calentamiento global, los consumidores conceden cada vez más importancia al enfoque responsable de los distribuidores. Por lo tanto, las empresas de distribución, responsables de una gran parte de las emisiones contaminantes en zonas urbanas, se centran hoy en reducir su impacto ambiental.
Por otro lado, se implementaron unas medidas con objetivo a restringir el acceso a los vehículos contaminantes en los centros de ciudades, especialmente para vehículos de entrega de paquetes que son en gran parte responsables de las emisiones de gas al efecto invernadero. Las medidas sobre zonas de bajas emisiones en numerosas ciudades deberían de incitar los distribuidores a adoptar un proceso más responsable.
Hoy en día, varias herramientas como (Odoo, Zoho, etc.) permiten a las empresas de venta en línea automatizar su gestión de existencias: seguimiento de productos vendidos, aumento de la velocidad a la hora de preparar los pedidos. Concretamente, estas soluciones permiten actualizar en tiempo real las cantidades de mercancías disponibles y activar el aprovisionamiento cuando las existencias están muy bajas. El objetivo es evitar un peligroso y temido agotamiento de existencias.
Cuatro funciones necesarias para gestionar tus existencias de manera óptima:
Ya no es solo cuestión de gastos de entrega, los consumidores dan mucha importancia a la posibilidad de elegir un lugar y una franja horaria de entrega. Quieren controlar la recepción de su mercancía y asegurarse de no perderse la visita del repartidor. Por eso es primordial permitir al consumidor determinar un lugar de entrega: su domicilio, su despacho, en tienda, en puntos de recogida o en consignas. Esa nueva tendencia debería instaurarse de manera definitiva en el futuro del e-commerce.
Con el fin de limitar los plazos de suministro de las mercancías y del coste operacional asociado, los distribuidores deben conseguir planificar de manera inteligente las operaciones de entrega. Planificar manualmente los itinerarios de entrega puede ser un rompecabezas en la logística del e-commerce de última milla.
Se desarrollaron soluciones para automatizar la planificación y construcción de rutas con programas informáticos, unas herramientas que ofrecen al cliente la posibilidad de elegir una franja horaria de paso. Las herramientas ayudan a limitar los intentos de entrega fallidos y costosos. Por otro lado, definir franjas horarias flexibles y rutas de distribución factibles aseguran un margen de seguridad en caso de retraso. Así, es más fácil para los repartidores, respetar el plazo de entrega inicialmente previsto.
Los API Rest permiten al transportista interconectar sus herramientas gracias a su sistema de toma de pedidos o de etiquetado de mercancía. Por otro lado, algunas herramientas disponen de integraciones con soluciones de gestion de pedidos (Odoo, Zoho, etc.) o de creación de sitio web de venta en línea (WooCommerce, Prestashop, etc.) es el caso del programa de optimización de rutas AntsRoute.
Más de la mitad de los vehículos de transporte viajan solo a la mitad de sus capacidades. Este fenómeno representa un impacto notable en el medio ambiente y eso se deteriora con las entregas en 24H. Algunas empresas tuvieron la idea de proponer una solución de mutualización de entrega.
Concretamente, mutualizar el transporte permite a varias empresas agrupar sus entregas en un centro de distribución. Los vehículos se encargan de suministrar los diferentes pedidos hasta los clientes. Dichas entregas realizas por una empresa externa permiten al distribuidor minimizar el coste y asegurar una optimización de las capacidades de los vehículos. En el futuro, esta iniciativa debería imponerse en el entorno urbano.
Mientras la entrega a domicilio sigue mayoritaria, los distribuidores deberían de incitar a sus clientes a elegir la entrega en puntos de recogida. Este modo de entrega es hoy una solución mucho más ecológica.
La entrega en puntos de recogida permite reducir el número de paradas del repartidor y así limitar sus desplazamientos. Las empresas reducen el consumo de sus coches y disminuye también el coste unitario de entrega. Este modo de entrega contribuye a reducir las emisiones de gas a efecto invernadero y la contaminación sonora en zona urbana. La entrega en puntos de recogida también permite al repartidor evitar un desplazamiento hasta un domicilio donde el cliente no está presente.
La logística de última milla tiene que ver también con la gestión de flujos de informaciones asociadas a las entregas. Los distribuidores deben permitir al consumidor seguir el envío de la mercancía. Unos sistemas permiten el envío automatizado de notificación por SMS o por email en cada etapa de la entrega. Se puede mandar un mensaje para informar sobre la hora prevista de llegada (ETA – Estimated time of arrival) y así asegurar la recepción de la mercancía.
Con el fin de limitar el impacto ambiental, los distribuidores pueden remplazar sus vehículos diésel por unos vehículos más respetuosos del medio ambiente. Así, para solucionar la problemática de la logística de última milla en zona urbana, las empresas pueden elegir vehículos eléctricos o GNV. Esos vehículos de bajas emisiones permiten al repartidor acceder al centro de la ciudad hasta en las zonas de bajas emisiones.
Dentro de pocos años, deberían desarrollarse nuevos métodos de entrega con el fin de reducir el plazo de envío y el coste asociado. Algunas empresas ya ofrecen alternativas vía infraestructuras de carreteras. Es el caso de la entrega de última milla por los aires, efectivamente ahora es posible entregar pedidos con drones y en las zonas de más difícil acceso.
En conclusión, los distribuidores deben centrarse en la optimización de logística urbana de última milla. Mientras el volumen de pedidos seguirá aumentando, las empresas deben implementar soluciones que permiten satisfacer las expectativas de sus clientes sin perjudicar el medio ambiente.
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