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7 Formas seguras de reducir el consumo de combustible de tu flota

Publicado en 16 diciembre 2022 • Lectura: 10 min read

Con un aumento de más del 50% en los últimos dos años, el precio del diésel está presionando gravemente los márgenes de beneficios del sector logístico. La mayoría de las empresas están repercutiendo este aumento o bien en sus facturas (el famoso “recargo por combustible”) o bien aumentando el precio de sus productos.
Sin embargo, los clientes no podrán aceptar aumentos tan frecuentemente, especialmente en un contexto de inflación desenfrenada, que causa ansiedad tanto a los consumidores como a los transportistas. Por lo tanto, la única solución sigue siendo reducir al máximo el consumo de combustible de tu flota de vehículos. Y en este sentido, hemos elaborado una lista con 7 métodos prácticos y legales que han demostrado ser eficientes.

Índice de contenidos

1. Forma a tus conductores en conducción ecológica
2. Apaga el motor del vehículo cuando esté parado
3. Realiza un mantenimiento periódicamente a la flota de vehículos
4. Optimiza las rutas de conducción
5. Utiliza el vehículo adecuada para cada viaje
6. Aumenta la tasa de carga del vehículo
7. Entrega en horas escalonadas

Ante el aumento de los costes, reducir el consumo de combustible se está convirtiendo en una cuestión estratégica para su flota corporativa. Optimizar el uso de la flota de vehículos ayuda a limitar los costes operativos. También reduce el impacto medioambiental.

Forma a tus conductores en conducción ecológica

Contrariamente a la creencia popular, la conducción ecológica no consiste en conducir más despacio, ni en alargar los tiempos de transporte para un mismo trayecto. Para consumir menos, el objetivo es más bien adoptar una conducción flexible y fluida aprovechando los principios básicos de la mecánica.

Según el Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE), una conducción eficiente es un estilo de conducción que contribuye a reducir el consumo de combustible, las emisiones al medioambiente y que además, mejora la seguridad en la conducción. El IDAE y el RACC (Real Automóvil Club de Cataluña) llevaron a cabo una formación en conducción eficiente y durante el proyecto se registró un 13,4% de ahorro en combustible. Este mismo programa también se realizó a los trabajadores de Correos, y en este caso se logró un porcentaje incluso mayor, con un registro de ahorro medio de carburante de un 14.02%. ¡Un porcentaje que realmente justifica la formación a tus conductores en este tipo de conducción económica y ecológica!

Consejos básicos para la conducción ecológica

• Arranca tu vehículo rápidamente sin dudar, y a continuación cambia rápidamente de marcha para optimizar la energía desplegada.
• Mantén una velocidad moderada durante los 3 primeros kilómetros, porque el coche consume mucho más combustible hasta que el motor alcanza su temperatura normal.
• Anticipa todo lo posible para evitar frenadas y aceleraciones bruscas, que son sinónimo de un alto consumo de combustible.
• Usa el freno motor antes que el pedal del freno, ¡no cuesta nada!
• Conduce a bajas revoluciones, aprovechando los rangos de fuerza óptimos. Estos están clasificados en aproximadamente 2000 rpm para un vehículo diésel, y entre 2000 y 2500 rpm para un vehículo de gasolina.
• En la autopista, adopta una velocidad razonable y regular. Cada vez es más fácil conducir con control crucero, incluido en la mayoría de vehículos nuevos.
• Apaga el aire acondicionado tan pronto como puedas, y nunca excedas más de 5 grados de diferencia con respecto a la temperatura exterior. El aire acondicionado, que consume hasta 1L por 100, sigue siendo una fuente de confort que consume mucha energía.
• Evita conducir con las ventanillas abiertas, incluso si el aire acondicionado está estropeado o si eres fumador. A alta velocidad, las ventanillas bajadas afectan en gran medida a la aerodinámica del vehículo, forzando al coche a consumir más energía.

Correos y su apuesta por una conducción sostenible

Correos apuesta por convertir las ciudades en mejores lugares donde vivir, contribuyendo a la mejora del aire que respiramos y reduciendo la congestión. Un objetivo alineado con los ODS (Objetivos de Desarrollo Sostenible).
Y en este sentido, Correos ha puesto en marcha diversas iniciativas para una conducción más sostenible. Entre ellas, un programa de formación centrado en la conducción segura y eficiente para sus empleados. Y a través del proyecto Eco-Traffic han podido comprobar el efecto de una formación de ese tipo: en 2018 Correos logró reducir en más de un 10% el consumo de combustible.
Además, con el uso de vehículos eléctricos en la última milla de reparto, en sustitución de vehículos térmicos, en 2016 Correos evitó el consumo de alrededor de 29.500 libros de combustible fósil y evitó la emisión de 71 toneladas de CO2 a la atmósfera. Para 2030, el objetivo de Correos es contar con 2.600 vehículos ecológicos. Lograr que un 50% de la flota sea sostenible, basada en tecnologías alternativas para minimizar el impacto en el entorno y, por lo tanto, reducir también el consumo de combustible.

Consejos de AntsRoute para una conducción ecológica optimizada

Aunque la formación en conducción ecológica es más económica a través de clases online en el corto plazo, te aconsejamos invertir regularmente en cursos presenciales. Esta solución es a menudo mucho más eficaz a la hora de eliminar los frenos psicológicos.

Apaga el motor del vehículo cuando esté parado

Entre los consejos más simples para ahorrar combustible, hay uno que aún no se sigue: apagar el motor cuando se hace una parada de más de 1 minuto. Por ejemplo:

• En atascos de tráfico u obras de construcción…
• Cuando el vehículo esté parado en doble fila o a un lado.
• Cuando esperas a cargar o descargar en la visita a un cliente, etc.

El tipo de sistemas Start and Stop están precisamente diseñados para apagar automáticamente el motor en cada parada, sin dañarlo. Y según la Oficina de Consumidores y Usuarios (OCU), apagar el motor en caso de paradas prolongadas puede suponer hasta un ahorro del 10% en combustible.

Estos sistemas actualmente van incorporados en muchos vehículos, incluyendo los vehículos pesados de mercancías. Sin embargo, la introducción de este sistema no ha hecho mucho por cambiar la situación. ¡Los malos hábitos son difíciles de desterrar! De hecho, muchos conductores ignoran la funcionalidad Start and Stop:

• Para encender la calefacción o el aire acondicionado.
• Mientras esperan a ser atendidos en un drive-through de un restaurante de comida rápida.
• En el lavadero de coches, etc.

Pero dejar el motor al ralentí tiene graves consecuencias en el gasto en combustible. Según el Departamento de Energía de los Estados Unidos, los camiones parados con el motor en marcha desperdician 126 litros de combustible cada segundo en Estados Unidos.

Desafortunadamente, frenar este consumo excesivo no es tarea fácil. Será necesario poner en práctica la resiliencia y entablar un diálogo con tus equipos para encontrar soluciones diseñadas caso por caso, como por ejemplo sistemas de calefacción que funcionan con el motor apagado. ¡Estos esfuerzos valen la pena a largo plazo! Según la OCU, un coche al ralentí consume 0,5 litros de combustible cada hora. Haz los cálculos para una gran flota internacional de vehículos pesados, ¡sumará una cantidad sorprendente!

Para ahorrar combustible, apague el motor si se detiene durante más de 1 minuto.

Realiza un mantenimiento periódicamente a la flota de vehículos

Cuando el flujo de efectivo disminuye, uno de sus efectos se refleja en la reducción de los gastos de mantenimiento. Sin embargo, ¡para ahorrar en combustible deberías hacer precisamente lo contrario! La Agence de la transition écológique en Francia (Ademe) ha hecho los cálculos: un mal mantenimiento del vehículo puede llevar a un consumo excesivo de combustible de hasta el 25%.

Inflar tus neumáticos con menos de 0.5 bares ya consume un 2.4% más de combustible. Para ahorrar dinero, te recomendamos un ligero exceso de inflación de 0.2 bares. Recuerda que lo ideal es medir la presión de los neumáticos cada mes, y durante los primeros 5 kilómetros, antes de que los neumáticos se calienten.

Del mismo modo, el aceite debe cambiarse regularmente, y los filtros y bujías deben revisarse en la frecuencia especificada en el libro de mantenimiento. Un filtro de aire obstruido causa problemas de combustión, ¡que puede costarte un 3% más de combustible!

Finalmente, recuerda revisar la alineación de las ruedas. Una mala alineación no sólo conlleva un consumo excesivo de combustible, sino que además puede suponer un desgaste prematuro de los neumáticos.

Optimiza las rutas de conducción

Planificar rutas de entrega es una operación extremadamente compleja, en la que muchos factores entran en juego:

• Horas de apertura para entrega o recepción.
• Peso o volumen de los objetos o materiales transportados.
• Características de cada vehículo (capacidad, licencia requerida, motor diésel, gasolina, eléctrico, etc.)
• Tipo de acción a realizar: operación de mantenimiento, reparación urgente, recogida, entrega, servicio médico, etc.
• Ubicación geográfica de los clientes a quienes se debe hacer la entrega.
• Información relacionada con la red viaria: atascos de tráfico recurrentes, obras temporales, desvíos en la ruta, prohibición de tráfico para determinados tipos de vehículos, etc.

En estas condiciones, ¡basta con la ausencia de un cliente, un desvío imprevisto o una incidencia en la carretera para que el viaje se alargue y el consumo de combustible se dispare!

Y en este contexto, cuando se requiere cotejar tantos datos para construir una ruta efectiva y sin sorpresas, la combinación de hojas de cálculo + software de navegación pronto se ve limitada. Únicamente softwares de optimización de rutas como AntsRoute pueden calcular las mejores rutas, sin desvíos innecesarios ni pérdida de tiempo.

El software de optimización de rutas AntsRoute.

Utiliza el vehículo adecuada para cada viaje

Para reducir eficazmente el consumo de combustible de tu flota, otra palanca esencial es seleccionar sistemáticamente el mejor vehículo disponible para una ruta determinada. Se puede definir un vehículo que cumpla con todas estas condiciones:

• Que consuma la menor cantidad de combustible posible para realizar el servicio requerido.
• Que pueda ser conducido por un conductor que tenga la licencia.
• Que respete todas las restricciones de la ruta: altura o peso máximo, zonas de baja emisión, etc.

De nuevo, los cálculos para determinar las mejores oportunidades son particularmente complejos. Por ejemplo, para realizar un mayor número de entregas en una ciudad muy densa como Londres o Manchester, el uso de varios vehículos eléctricos es a veces más eficiente que usar un camión pesado, aunque no siempre es así. Por el contrario, en viajes largos en áreas rurales, es tentador optar por un camión diésel muy grande para así emplear menos conductores. En teoría, cuanto más grande es el vehículo, menos deben reducirse las distancias recorridas.

Pero la mejor solución no es necesariamente la más intuitiva, ¡ni mucho menos! Nuevamente, solo el uso de un software de optimización de rutas puede ahorrarte largas sesiones de puzzles frente a tu pantalla: el ahorro de combustible seguramente compensará con creces el precio de la suscripción del software. Este tipo de herramienta permite ahorrar hasta un 35% en costes operativos, con un promedio observado alrededor del 20%.

Aumenta la tasa de carga del vehículo

Alquilar un vehículo sobrecargado provoca un consumo excesivo de combustible y un desgaste acelerado de los neumáticos. Pero tener en funcionamiento un camión vacío o con poca carga tiene un impacto muy negativo tanto a nivel económico como medioambiental. Un estudio científico realizado por la Organización Internacional del Transporte por Carretera (IRU) ha demostrado que un camión de 40 toneladas completamente cargado consume “solo” 10 litros más de diésel cada 100 kilómetros en comparación con un camión vacío, es decir, 39.2 frente a 29.3 litros.

Para reducir estos transportes con carga insuficiente y, por lo tanto, optimizar el consumo de combustible, hay varias soluciones disponibles:

• Analizar tu rendimiento cliente por cliente y renegociar contratos que imponen demasiada presión en los plazos.
• Facturar costes adicionales o incrementar el precio en caso de un transporte por debajo de la capacidad impuesto por el cliente.
• Recurrir a una bolsa de cargas para maximizar las cargas o, por el contrario, subcontratar determinados envíos poco rentables.

Cualquiera que sea la solución elegida, nuestro software incluye funcionalidades muy útiles para mejorar la carga de vehículos respetando sus limitaciones, como por ejemplo un módulo para gestionar las capacidades de tu flota, vehículo a vehículo.

La gestión de las capacidades de carga de los vehículos con la herramienta AntsRoute.

Entrega en horas escalonadas

Este último método obviamente no está al alcance de todas las empresas. Pero varios experimentos realizados en los Países Bajos y Francia han demostrado que las entregas en tiempos escalonados suponen un ahorro real de energía, ¡y no únicamente de combustible!

Durante estos experimentos, se tomaron muchas precauciones para limitar las molestias, como el uso de máquinas eléctricas, GNC o vehículos que respetaban los umbrales de rendimiento sonoro (camiones conocidos como “PIEK”).

En el área metropolitana de Burdeos, otro experimento realizado con el club “Déméter Environment & Logistique” permitió cuantificar objetivamente los ahorros vinculados a la jornada laboral escalonada. El informe final destaca una “reducción del consumo de combustible en caso de cambio de entrega diurna a entrega nocturna […] en un orden de magnitud de entre 3 y 4% en proyección isométrica”. Otra fuente importante de ahorro proviene de una reducción en el uso de camiones con control de temperatura (positiva o negativa), que registran un tiempo de consumo significativamente menor cuando están parados. Este punto es tanto más importante cuanto que los motores que alimentan las unidades de refrigeración “funcionan a una velocidad constante, cualquiera que sea el entorno y la velocidad del vehículo”. Una reducción de la duración del recorrido, por tanto, se traduce directamente en una reducción del consumo de gasóleo.

En general, la lección que se puede aprender de estos diferentes experimentos es que las entregas en horarios escalonados consumen menos energía, gracias a la reducción del tiempo de viaje. Si, por ejemplo, realizas entregas a industrias que trabajan en 2×8 o 3×8, la hipótesis de las entregas nocturnas, temprano en la mañana o los fines de semana, por lo tanto, ¡merece ser estudiada!

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